Caso de éxito, III entrega de una saga en 4 partes

Continuamos hoy con la tercera parte del caso de éxito en la obtención de la Nacionalidad por Ley Nietos de un Expediente ‘congelado’ en el Caribe.

Hasta hoy, le recordamos al lector, hemos publicado las dos primeras partes así como un preámbulo anunciando el acontecimiento

  1. Caso de Éxito: Cubano-americano con Expediente resuelto favorable
  2. Nacionalidad ley nietos(Testimonios ): CASO DE ÉXITO, I parte
  3. Testimonios, ley nietos: CASO DE ÉXITO, II parte

caso de éxito

Testimonios Nacionalidad Ley Nietos

UN PASO ADELANTE…Y UN SINFIN DE PASOS ATRÁS

Con bastante celeridad —unos meses después de hacer el encargo— recibí por correo rápido internacional (DHL) los documentos subsanados y oficializados.

Pensé que ese Grupo RR debería tener delegados, corredores, emisarios y/o negociantes por toda la isla de Cuba

Los documentos estaban por la zona central del país, en diferentes municipios de Villaclara.

Envalentonado y aupado por este gran paso adelante, volví a Miami para presentar en persona los documentos corregidos y legalizados en el Consulado de España en Miami.

“Ahora sí, socio” me dije en voz baja cuando en el Consulado me aceptaron los documentos y me dieron un comprobante de ello.

Era ya el 2011: me había tardado un año en presentar todo correctamente, pero  estaba seguro de que pronto se resolvería mi expediente favorablemente.

Ja ja ja ja…qué ingenuo era yo en aquel momento, sin mínimamente sospechar lo que me esperaba

Iluso incurable que soy, después de haber presentado los documentos en 2011 comencé a preguntar en el Consulado de España en Miami si había movimiento o noticias en torno a mi expediente. A veces llamaba por teléfono, a veces lo hacía por correo electrónico

La mayoría de las veces me decían lo mismo: todo estaba en manos del personal del gobierno español en La Habana.

Estaba claro: el triángulo España-Cuba-EEUU estaba dibujado con tinta negra imborrable en un papel burocrático

Yo tenía que permanecer dentro del triángulo indefinidamente.

Caso de éxito, III parte

TRABAS, ATASCOS, INACTIVIDAD Y ENTUMECIMIENTOS

 

 

Caso de Éxito, ley Nietos

 

Mi insistencia solamente logró desatar una secuencia de peticiones

En algunas ocasiones parecían innecesarias

En otras tenían pinta de mala leche. Una breve cronología de lo que se me pedía (como solicitante) de mi, de mi padre y de mi abuelo:

2010: solicitud de la nacionalidad española inicialmente presentada (expediente abierto)

2011: Presentación de documentos legalizados con errores subsanados.

2012: Petición del certificado de matrimonio del abuelo español (casado en Cuba)

2012: Petición del certificado de defunción del abuelo español (fallecido en California, EEUU)

2013: Petición de la certificación de ciudadanía cubana del abuelo español

2013: Petición del certificado de defunción del padre (fallecido en Florida, EEUU

2014: Rechazo de la certificación de ciudadanía cubana del abuelo español presentada; petición del mismo documento pero expedido por otro organismo en Cuba (y oficializado apropiadamente)

2014: Petición del certificado de inscripción de la ciudadanía cubana del abuelo (expedido por otro organismo en Cuba)

2015: Petición de la acreditación de nacionalidad española del abuelo

2015: Petición del acto de asentamiento de inscripción del abuelo (ya previamente pedida y presentada, pero emitido por otro organismo en Cuba)

En otras palabras, me hicieron repetidas peticiones, muchas veces del mismo documento pero “de diferentes colores”

Y a veces hasta me pedían documentos que tendrían que haber sido pedidos personalmente por mi abuelo (lo cual, por supuesto, era imposible).

Era una estrategia que combinaba trabas, inactividad, incompetencia, apatía, batacazos e incongruencias

Para cualquier otra persona más inteligente que yo, estaba diseñado para disuadirme del asunto.

 

Momento de intensificar la batalla

Llegué a pensar que querían denegarme lo que por ley se me debía conceder. Llegué a pensar que tal vez, en el peor de los casos, había una especie de complot pasivo-agresivo para esperar a que muriera para no tener que concederme la española que tanto deseaba.

En respuesta a las peticiones, a veces los colegas del Grupo RR hacían las gestiones necesarias

Otras veces yo contestaba a las peticiones aclarando que ya se habían cumplido (y enviaba los documentos previamente presentados, asumiendo que sencillamente se habían extraviado).

En varias ocasiones, el Grupo RR hasta se ofreció a pedirle a sus emisarios en Cuba que sencillamente intentaran averiguar si era posible agilizar de una forma apropiada el procesamiento de mi expediente.

Esos y otros gestos hicieron que mi relación de cliente con el Grupo RR se convirtiese en amistad: ya había confirmado muchas veces que se trataba de personas que eran gestores fiables, profesionales y hábiles: eran personas que se ocupaban y preocupaban por sus clientes. Sin embargo, estaba claro que ni sus acciones ni sus buenas intenciones habían podido mover, hasta el momento, aquella inercia.

Era hora de intensificar la batalla, si ello era posible.

Llegado a este punto estamos muy cercanos a asistir al final de esta historia. En la próxima entrega estaremos llegando al final donde NEM cuenta su final Feliz.
No se pierda la 4ª parte y final.
Si lo desea puede dejarnos sus comentarios

También aceptaremos su solicitud de servicio de asesoramiento-acompañamiento para resolver su Expediente si aún está en los vericuetos y laberintos burocráticos de las oficinas consulares hispanas

 

Edición Martes